Con la alegría y la energía que les caracteriza a jóvenes de su edad, los estudiantes de tercero de Bachillerato participaron en la tradicional despedida.
Entrega de reconocimientos, crossfit, pulseadas, ensacados, fútbol-vóley, el reto de la soga y un partido de fútbol fueron algunas de las actividades en las que participaron los alumnos, junto a muchos de los profesores que los acompañaron desde su etapa escolar.
Fue una jornada de confraternidad, llena de bromas, risas, firma de camisetas y anécdotas, que terminó con una deliciosa parrillada y el recuerdo permanente que “una vez Torremar, Torremar para siempre”.