Confío

Ya son 36 años, de aquella linda aventura, de luchar por la defensa de la vida, desde la concepción hasta la muerte natural. Comenzamos con un grupo muy pequeño, llamado Corporación Defendamos la Vida. Luego, mis amigas, mis amigos y yo, nos separamos, porque cada uno tenía compromisos con su familia y con su profesión.

Pero nosotros continuamos. Seguimos…, y poco a poco…, nos enamoramos de esta misión, que el Señor nos encargó. Han pasado muchos años, y aún recordamos nuestros inicios, con charlas en Colegios, que luego se extenderían a diferentes grupos.

Desde entonces, no hemos parado de hablar, de escribir, y de movernos. Seguimos, a la espera de que el Señor nos diga: “hasta aquí nomás”. Y es muy necesario, que ustedes continúen con esta labor. Recuerden siempre lo que dice el Talmud: “Quien salva una vida, salva al Mundo entero” …, y qué lindo es salvar vidas, sobre todo, la vida de los no nacidos.

Confiamos en ustedes, y en sus hijos. No se necesita de conocer mucho, ni de haber estudiado temas médicos. Hay que leer, indudablemente, pero sobre todo hay que tener convicción y perseverancia, que el resto, el Señor lo da por añadidura.

La defensa de la vida. Sus hijos lo han aprendido aquí en el Colegio y creemos, plenamente, que lo aprenderán también de ustedes.

Saludos,

Departamento de Familia