Hay un instante cotidiano que vivimos absolutamente TODAS las personas, y que puede ser nada menos que determinante para todo el resto de nuestro día; de todos y cada uno de nuestros días; lo que quiere decir, al fin y al cabo, que ¡ese instante puede ser determinante para el provecho de toda nuestra vida!
Quien habla de él es un santo del siglo XX, San Josemaría Escrivá, fundador del Opus Dei. En su libro “Camino”, él presenta diversas reflexiones breves, pero certeras, para quien quiere cambiar de vida mediante el dominio de sí mismo.
Y dos de ellas (que ofrecemos abajo con el respectivo número dentro del libro) hacen directa mención al “minuto heroico”. Allí van:
“El minuto heroico. Es la hora exacta de levantarte. Sin vacilar: un pensamiento sobrenatural y …, ¡fuera! El minuto heroico: ahí tienes una mortificación que fortalece tu voluntad y no debilita tu naturaleza”. (Camino 206).
“Véncete cada día desde el primer momento, levantándote puntualmente a una hora fija, sin conceder un solo minuto a la pereza. Si, con la ayuda de Dios, logras vencerte, mucho habrás adelantado para el resto del día. ¡Desmoraliza tanto sentirse vencido en la primera batalla!”. (Camino 191).
Sólo tienes una manera de experimentarlo: ¡prueba mañana mismo! (Redacción de Aleteia).
Saludos,
Departamento de Familia