CLUB DE PERIODISMO: REFUGIADOS: LAS DOS CARAS DE LA MONEDA

CLUB DE PERIODISMO: REFUGIADOS: LAS DOS CARAS DE LA MONEDA

Como consecuencia de los recientes conflictos en las diferentes regiones del planeta, el Comité Olímpico Internacional (COI) y el Comité Organizador de las Olimpiadas de Brasil resolvieron crear un “equipo” para todos aquellos atletas que no puedan representar a su país de origen. Diez atletas de diferentes disciplinas formaron parte de este “equipo olímpico”. Esta iniciativa buscó dar esperanza y ser una luz para quienes han tenido que huir de sus países por diversos motivos, al mismo tiempo ayudó a estos atletas a competir por sus sueños.

Esta historia nos lleva a pensar, si los refugiados son acogidos y admirados (como debe ser) en este tipo de eventos deportivos, ¿no deberían serlo también en el día a día? Es una lástima saber que no es así. Diariamente millones de refugiados son agredidos física y psicológicamente alrededor del mundo.

Así como algunas personas con estos problemas han sido puestas en un podio y han encantado las pantallas de millones de televidentes en las recientes Olimpiadas, también hay muchos otros que son marginados por la sociedad. Mientras unos se hospedan en la seguridad y la comodidad de las villas olímpicas, otros viven bajo condiciones inhumanas y corren peligro en refugios clandestinos.

Esta segunda cara de la moneda nos deja la idea de que el mundo se está quedando en lo superficial y, si bien la ayuda hacia estos atletas que han pasado por tanto, es merecida y completamente positiva, tenemos la obligación de ir más allá y no quedarnos sólo con lo que se pasa por televisión.

Debemos ayudar a concientizar al mundo sobre los arduos momentos y conflictos por los que estos refugiados pasan. Debemos ser el cambio, para tratar de que todos los días más y más de estas personas tengan una mejor calidad de vida y tengan nuevamente la oportunidad de formar parte de la sociedad.

Permitamos que sean la voz de todos aquellos que la han perdido, quienes nos muestren eso que tanto queremos evadir: la cruda realidad de este mundo en el que vivimos.

Pedro Valverde
Segundo de Bachillerato
Club de Periodismo y Debate