Hay muchas cosas que nosotros, como padres, como educadores, queremos transmitir a los hijos, y dedicamos, a veces, muchas horas a hablar con ellos; a tratar de enseñarles, y al final nos preguntamos: ¿realmente me escuchó?…. ¿Logré que me entendiera?
Es una pena que los jóvenes de hoy, hagan más caso a lo que ven o leen en la redes sociales, que a lo que nosotros queremos inculcar en ellos como norma de vida, como criterio bien formado. Entonces nos preguntamos: ¿qué hacer?
A nosotros nos corresponde continuar con esta tarea; no darnos por vencidos; decir lo que tenemos que manifestar, y en el momento en que debemos hacerlo; cumplir con nuestra responsabilidad de formar a nuestros hijos.
Si hacemos lo que debemos, recogeremos los frutos, y podremos decir al final como San Pablo, que a pesar de nuestras limitaciones, hicimos lo que debíamos hacer.
Saludos,
Departamento de Familia