Qué importante es que nuestros hijos estén al tanto de lo que sucede en nuestra sociedad. Que puedan crecer con criterios claros, propios de la buena formación que reciban en el hogar.
Cada vez surgen más ideologías, que buscan confundir a las personas de todas las edades, pero principalmente a los más jóvenes: a los niños y adolescentes, cuyos juicios morales sobre determinados actos están construyéndose día a día.
Un destacado educador europeo nos hablaba hace algún tiempo, de que hay que aplicar en nuestros hijos la Teoría del Teatro. Esta nos dice que la mente del niño es como un gran teatro lleno de sillas, y que somos los padres y los educadores quienes tenemos que llenar estas sillas con normas, principios y valores, para que, cuando lleguen las ideologías perjudiciales a sentarse, encuentren estas butacas ocupadas, con toda la formación que nosotros les hemos brindado a nuestros hijos.
Una de las ideologías que más confusión está sembrando en los niños y adolescentes es la de género, que el Papa Francisco ha señalado “entre las interpretaciones desviadas de la persona humana, con sus lagunas y defectos doctrinales gravemente perniciosos para la vida social”.
¿Estamos enterados de estos temas? ¿Nuestros hijos están preparados para enfrentar una carga ideológica cada vez más dañina? ¿Qué estamos haciendo para formarnos, y luego brindar una adecuada orientación a nuestros hijos? Son preguntas que nos deben motivar a instruirnos constantemente, para dar respuestas convincentes a todas las interrogantes que nuestros hijos nos plantean diariamente.
Saludos,
Departamento de Familia